Cookies con chips de chocolate

Crujientes por fuera y cremosas por dentro

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Porciones 24 galletitas

Colocar la manteca cortada en cubitos en una cacerola.
Llevar al fuego hasta que se derrita la manteca y cocinar por 2 o 3 minutos hasta que tenga un color avellanado. En el fondo de la cacerola debería quedar el sedimento de la manteca.
Filtrar la manteca con un colador con un papel de cocina o filtro de café.

Precalentar el horno a 160°C.
Preparar una placa con una plancha de silicona, papel manteca o enmantecada y enharinada.
Colocar la manteca noisette todavía caliente en un bol.
Adicionar la manteca pomada a la manteca noisette. Esperar a que se derrita e integrar.
Adicionar el azúcar blanca, el azúcar rubia y la esencia de vainilla. Batir hasta que se integre bien.
Añadir el huevo y la yema. Integrar.
Tamizar la harina y el bicarbonato de sodio e incorporar a la preparación. Integrar con espátula de goma.
Adicionar los chips de chocolate. Integrar.
Armar bolitas de aprox 40 gr y colocar en la placa. Dejar espacio entre pelotita y pelotita porque crecen en el horno.
Hornear por 10 minutos. Rotar y hornear por 4 minutos más.

Las claras sobrantes podés reservarlas en la heladera y utilizarlas para otra preparación. ¿No sabes qué hacer con las claras que te sobraron? ¡Mirá mi receta de la angel cake!
Si no tenes chips de chocolate, podes ponerle chocolate picado.
¡Si no queres hornear todas las galletitas, podes armar la bolitas, ponerlas en una placa y llevarlas al congelador. Una vez congeladas podés guardarlas en una bolsita y cocinarlas otro día! Cuando las quieras cocinar, no hace falta descongelar las bolitas, podés ponerlas directo en una placa y hornearlas en un horno precalentado en 150°C.
Para que las galletitas queden tan lindas como las que ves en Pinterest, agregale algunos chips de chocolate más por fuera de las bolitas para que cuando se abran en el horno, los chips queden por arriba.