Preparar una tartera desfondable de 20cm de diámetro y 3cm de altura.
Colocar la harina y la sal en un bol
Adicionar la manteca fría cortada en cubos.
Aplastar, estirar, apretar y frotar los cubos de manteca hasta integrarlos con la harina, formando una arenilla húmeda y homogénea, sin rastros de manteca.
Adicionar el azúcar impalpable tamizada. Integrar.
Hacer un hueco en el medio y añadir el huevo. Integrar (es importante no amasar la masa para que no se desarrolle el gluten).
Estirar la masa con un palo de amasar entre dos papel film, papel manteca o planchas de silicona.
Colocar la masa en una placa y llevarla a la heladera por al menos 2 horas hasta que la masa tome consistencia.
Fonzar la tarta en el molde. Pinchar la masa con un tenedor.
Añadir la mermelada de durazno encima de la masa. Reservar en heladera