Un básico de la pastelería. Para usar como una clásica mermelada o como ingredientes de algunos clásicos como la Sacher Torte

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Lavar los damasco.

Hacer cortes en cruz en los extremos los damascos con un cuchillo

Colocarlos en agua hirviendo por 30 segundos para que se comience a desprender la piel.

Retirar del agua y con cuidado pelarlos.

Cortarlos por la mitad y sacar los carozos.

Cortar en cubos y colocarlos en una cacerola de boca ancha.

Pesar el damasco. Dependiendo del peso calcular la cantidad de azúcar con una regla de 3 simple. En mi caso tengo 760 gr de damasco así que necesito 300 gr de azúcar. El cálculo sería: 760 gr (de damasco) x 400 gr (de azúcar) /1000 gr (de damasco) = 300 gr (de azúcar).

Agregar el azúcar y el jugo de limón. Integrar.

Dejar macerar por al menos 1 hora.

Llevar a fuego fuerte hasta que hierva revolviendo constantemente. Luego cocinar a fuego bajo hasta que espese. Es importante revolver la preparación cada tanto para que no se queme.

Para comprobar que la mermelada esté lista:

Al pasar la cuchara se logra ver el fondo de la cacerola y a la mermelada le cuesta volver a unirse
La mermelada caliente va a estar más líquida que cuando se enfría. Es importante no tratar de llegar al punto que uno quiere llegar cuando esté caliente porque cuando se enfríe va a estar más espesa de lo necesario.
Para chequear que la mermelada esté en su punto correcto: apagar el fuego, colocar un poquito de la mermelada en un platito y llevar a la heladera unos 10 minutos hasta que se enfríe. Una vez fría comprobar que la textura de la mermelada sea la deseada. Si está en el punto se puede envasar. Si le falta consistencia, volver a calentar y cocinar por unos minutos más.

Colocar en un contenedor. Dejar enfriar a temperatura ambiente y reservar en la heladera.

Mermelada de damascos

Un básico de la pastelería. Para usar como una clásica mermelada o como ingredientes de algunos clásicos como la Sacher Torte

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Ingredientes

Proporción

1 kg Damascos maduros limpios (pelados y descarozados)
400 gr Azúcar blanca
1 cda Jugo de limón 20 ml

Paso a paso

Lavar los damasco.
Hacer cortes en cruz en los extremos los damascos con un cuchillo
Colocarlos en agua hirviendo por 30 segundos para que se comience a desprender la piel.
Retirar del agua y con cuidado pelarlos.
Cortarlos por la mitad y sacar los carozos.
Cortar en cubos y colocarlos en una cacerola de boca ancha.
Pesar el damasco. Dependiendo del peso calcular la cantidad de azúcar con una regla de 3 simple. En mi caso tengo 760 gr de damasco así que necesito 300 gr de azúcar. El cálculo sería: 760 gr (de damasco) x 400 gr (de azúcar) /1000 gr (de damasco) = 300 gr (de azúcar).
Agregar el azúcar y el jugo de limón. Integrar.
Dejar macerar por al menos 1 hora.
Llevar a fuego fuerte hasta que hierva revolviendo constantemente. Luego cocinar a fuego bajo hasta que espese. Es importante revolver la preparación cada tanto para que no se queme.
Para comprobar que la mermelada esté lista:
a. Al pasar la cuchara se logra ver el fondo de la cacerola y a la mermelada le cuesta volver a unirse
b. La mermelada caliente va a estar más líquida que cuando se enfría. Es importante no tratar de llegar al punto que uno quiere llegar cuando esté caliente porque cuando se enfríe va a estar más espesa de lo necesario.
c. Para chequear que la mermelada esté en su punto correcto: apagar el fuego, colocar un poquito de la mermelada en un platito y llevar a la heladera unos 10 minutos hasta que se enfríe. Una vez fría comprobar que la textura de la mermelada sea la deseada. Si está en el punto se puede envasar. Si le falta consistencia, volver a calentar y cocinar por unos minutos más.
Colocar en un contenedor. Dejar enfriar a temperatura ambiente y reservar en la heladera.

TIPS Y TRUCOS

A los damascos también se los conoce como albaricoques
Es importante utilizar fruta madura para hacer mermelada, porque tiene mucho más sabor!
La mermelada puede conservarse en la heladera por 2 meses y envasada al vacío durante 1 año. Si queres aprender a envasar tus mermeladas al vacío, hacé click acá!
La mermelada de damasco se usa como relleno para algunas recetas clásicas, como la Sacher Torte. Si queres aprender a hacer este clásico austriaco hacé click acá!